Cuando se piensa en montar una tienda virtual de ropa, es inevitable afrontar la cuestión de la fotografía de productos. ¿Hay alguna diferencia entre la presentación de los productos para el mercado online y para una tienda convencional? ¿La creatividad en la fotografía de ropa es siempre beneficiosa, o puede llegar a ser totalmente innecesaria? ¿Existe un estándar al que ceñirse a la hora de fotografiar la ropa? En nuestra guía básica encontrarás útiles consejos que te ayudarán a fotografiar ropa con fines comerciales.
Antes de lanzarte a fotografiar todas tus colecciones, deberías hacerte dos preguntas iniciales:
- ¿Para quién fotografío?
- ¿Qué finalidad tienen las fotos?
Una vez les hayas dado respuesta podrás centrarte en la configuración del estudio y seguir con la técnica fotográfica. En la mayoría de los casos también es necesario aplicar técnicas de postprocesado y organizar el material para su subida a la red.
Existen multitud de prácticos trucos en cada uno de los diversos enfoques existentes para fotografiar prendas de vestir, así que los hemos organizado progresivamente, de acorde a las distintas etapas del proceso fotográfico. Haremos un recorrido desde la preparación de la sesión hasta la publicación de las fotos.
Tabla de contenidos
Fotografía de ropa: ¿para quién y con qué fin?
Las prendas de ropa cumplen diferentes propósitos: algunas nos protegen en el trabajo y otras nos hacen lucir fabulosos en fiestas, mientras que las hay que simplemente nos mantienen calentitos durante el invierno. Tus clientes buscarán ropa para todo tipo de ocasiones, por lo que sus expectativas acerca de las fotografías que ilustren tu tienda virtual variarán según la situación.
Es por esto que debes considerar a las fotografías de tus prendas como si fueran el mostrador o el escaparate de un comercio convencional. Si buscas llamar la atención de aquellos interesados en el glamour, muéstrales encajes intrincados en blanco y rosa bajo una luz suave y cálida. Para los que vienen a comprar ropa de viaje, lo mejor es iluminar las prendas de forma que se aprecien con claridad todas su funcionalidades, sin excesos en la presentación.
Si has leído nuestro artículo sobre la fotografía de zapatos, es posible que recuerdes la diferencia entre una foto lookbook y un packshot, y debes saber que todo lo que dijimos entonces se puede aplicar también a la ropa:
- fotos lookbook – su objetivo es atraer, transformar la atención del cliente en una decisión de compra y mostrar el valor añadido de sus prendas. En una foto lookbook se presenta la ropa en acción, con modelos que la hacen lucir en un entorno colorido, y existen menos reglas en lo referente al encuadre y al enfoque de las fotos. En este sentido, podemos considerar la fotografía de lookbook como un ejercicio casi artístico.
- packshots – su objetivo es informar, asegurar una decisión de compra más racional. La meta es mostrar todas las características importantes de una prenda, como en un catálogo. Para ello usaremos fondos blancos y ángulos estandarizados, con el objetivo de facilitar la repetición de tomas.
Será más fácil tomar una decisión sobre el estilo a seguir durante la sesión si sabemos el uso que se va a dar a las fotos resultantes. Las fotos lookbook son perfectas para redes sociales como Instagram o listados secundarios, mientras que los listados principales o las miniaturas de la página principal son el lugar adecuado para los packshots.
Estudio fotográfico: ¿es necesario?
La forma en la que organices una sesión de fotos tendrá un gran impacto en el coste final y la calidad del material resultante. De hecho, una de las primeras preguntas que deberías hacerte es si prefieres abordar la producción fotográfica de manera interna o subcontratar a un estudio externo.
Si optas por afrontar esa tarea tú mismo, ganarás en independencia y simplificarás la logística, pero te harán falta más conocimientos y habilidades. Puedes construir tu propio estudio fotográfico con iluminación avanzada y soportes de cámara o trípodes, distintos telones de fondo o una mesa de luz, así como toda clase de equipo adicional, como plataformas giratorias, brazos motorizados y diversos accesorios. También serán necesarias las licencias de muchos programas de estudio.
Otra solución para obtener tus fotos de manera interna es invertir en tecnologías de automatización. Se trata de estudios fotográficos que integran hardware y software para fotografiar productos de distintos tamaños e incluso modelos. Estos dispositivos de manejo sencillo facilitan el trabajo de sus operadores, lo que junto a su función de eliminación de fondos acelera significativamente el proceso fotográfico.
La automatización es la forma más rápida de garantizar la repetibilidad de tus packshots y librarte de las complicaciones derivadas de la subcontratación, como una logística enrevesada o los riesgos del factor humano (vacaciones, bajas). El proceso fotográfico avanzará sin trabas gracias a la fluidez que brindan los estudios automatizados, y si tu ritmo de producción aumenta tanto que un dispositivo no es suficiente, ¡es tan sencillo como comprar otro!
La solución del flat lay
La fotografía en flat lay, o sobre plano, puede considerarse una buena idea para proyectos con poco presupuesto. Es sencillo, atractivo y, sobre todo, barato. La sesión es rápida, con tomas de un buen nivel de repetibilidad, y no es necesario emplear modelos o maniquíes. No se necesita un estudio ni contratar personal.
Su principal característica es también el principal inconveniente de la fotografía en flat lay: la ropa pierde tridimensionalidad, y puede formar formas poco naturales cuando se coloca en plano. También será más difícil dar una impresión sobre su tamaño sin añadir atrezo y referencias de escala.
Consejos básicos para fotografiar ropa
Cuidado con la información
Un buen packshot de ropa no engaña. Presentará el aspecto general y los detalles de un artículo tal y como son. Esto incluye la paleta de colores (procura no tocarla demasiado durante la posproducción), la textura del material (puedes recurrir a una iluminación profesional desde un ligero ángulo) y, por supuesto, los pequeños detalles como cremalleras, pliegues y cordones.
El principal propósito de un packshot es informar. Por tanto, debemos renunciar a los efectos de postprocesado que mejoran la impresión general de la foto en pos de mantenernos fieles a la realidad.
¿Qué hacer con el fondo?
El eterno dilema de los fotógrafos de packshots es sin duda el de decidir entre fotografiar los artículos con un fondo o recurrir a la posproducción para eliminar el mismo. Hemos tocado este tema tan técnico, incluso filosófico, en nuestro artículo sobre cómo eliminar el fondo de una foto de producto.
Por supuesto, no hay una respuesta definitiva a esta cuestión a la hora de fotografiar prendas. Sin embargo, cabe mencionar que NO borrar el fondo de las fotos conlleva unos riesgos:
- incapacidad para lograr iluminar correctamente tanto el producto como el fondo. Cuando se ajusta la iluminación es preciso conseguir un delicado equilibrio entre la correcta iluminación del producto y el fondo. Si vamos a eliminar el fondo, la elección es simple: ante todo, se ilumina el producto.
- problemas de contraste en los bordes del producto. Los productos brillantes, satinados o blancos perderán nitidez en los bordes, haciendo que se fundan sutilmente con el fondo. Si centras la iluminación en el producto y luego lo recortas del fondo, el problema desaparece.
- dificultad para conseguir un fondo RGB puro (255,255,255). Algunas plataformas como Amazon o Ebay acostumbran a exigir a sus vendedores un fondo blanco perfecto en sus fotos. Es casi imposible lograr esto en un fondo sin recortar, a menos que se le aplique un cuidado posprocesado.
- menor versatilidad en cuanto a reemplazar el fondo por uno más colorido o usar la foto en un catálogo. Cuando hablamos de ropa, probablemente tendrás que situar una foto en un contexto concreto o utilizar un fondo poco convencional a menudo. En estos casos será necesario recortar el producto…
Packshots – categorías de fotos de ropa
Si lo que buscas para tu tienda de ropa virtual es versatilidad, te interesa considerar incluir los siguientes tipos de packshots en tus listados de productos. Vamos a ver cuáles son sus principales ventajas e inconvenientes:
Fotografía de modelos
Si presentas las prendas en entornos reales o incluso vistiendo a modelos, tendrás la valiosa oportunidad de ilustrar cómo interactúan los tejidos con el cuerpo humano. Tus clientes podrán comprobar cómo se arruga o la caída que tiene, ante cuestiones como «¿es esta pana lo suficientemente flexible?» o «¿será esa falda tan ligera como para llevarla en verano?»
Además, las tallas se mostrarán en relación a la figura humana, dejando ver si las mangas son largas o sólo hasta el codo, si la falda llega a las rodillas, etc.
Las fotografías con modelos a menudo fomentarán decisiones de compra en tus clientes mientras curioseen entre tus productos.
Fotografía con maniquíes
Es una buena solución alternativa a la presentación de ropa con modelos reales. Un maniquí proporciona la misma información sobre el tamaño de las prendas y sus pliegues que un modelo, pero no tiene la capacidad de mostrar la caída del material en movimiento.
También se desaprovecha la oportunidad de beneficiarse de la belleza del modelo, y tu presentación corre el riesgo de resultar «seca y aburrida». Aun así, es una forma más barata que los modelos reales de conseguir unos resultados similares.
Fotografía con maniquíes fantasmaGhost mannequin photos
Los maniquíes fantasma son elementos de atrezo que cumplen la misma función que los normales, pero solo reproducen la forma humana parcialmente. Puedes pensar en exhibir una camisa o una gorra sobre el torso o la cabeza de la figura de un maniquí.
Este tipo de fotos son muy populares en las plataformas de e-commerce, ya que permiten al fotógrafo capturar el artículo desde mejores ángulos y tomar primeros planos de distintos detalles sin preocuparse del movimiento. De nuevo, obtenemos algunas de las ventajas de presentar los productos en modelos reales por un coste menor y una logística más sencilla.
Fotografía estilo flat lay
El estilo flat lay es una forma habitual de presentar los productos en redes sociales y portales de subastas. No requiere ningún tipo de atrezzo adicional, tan solo una pequeña preparación del producto. Son fotografías que dan una buena idea general de la prenda, aunque no son muy efectivas a la hora de aportar información sobre su tamaño y proporciones. Describimos las mejores formas de abordar la fotografía en flat lay en un artículo al respecto, incluyendo la preparación del producto, los ángulos de toma y los ajustes de cámara.
Elementos multimedia: una tienda virtual espectacular
Las últimas tendencias en marketing online y experiencia de usuario en el ámbito del e-commerce señalan claramente que los usuarios esperan una información cada vez más precisa sobre el producto. Por supuesto, también sucede en el caso de la ropa: los clientes buscan experimentar el producto de manera casi real. Este contexto ha propiciado la inclusión de elementos multimedia como vídeos y presentaciones en 360º en muchas tiendas virtuales, y no parece que vayan a irse a ningún lado.
Los elementos multimedia permiten ver las prendas desde distintos ángulos, girarlos y observar cada detalle mediante tomas ampliadas. Las visitas o presentaciones virtuales también han ganado popularidad, sobre todo para mostrar productos con acabados muy cuidados y construcción precisa, como prendas de viaje o equipamiento técnico. Conviene no olvidarse de la presentación con modelos, ya que da más información sobre el tamaño, el aspecto general y el tacto del artículo. Puedes consultar nuestra guía sobre cómo reducir el número de devoluciones en el e-commerce si quieres algunos consejos útiles sobre la presentación de las prendas.
¿No te parece que es útil poder compartir toda la experiencia que rodea a un vestido bonito en tus redes sociales, de una forma atractiva? ¿Tener posts que capten la atención de tus clientes durante más de unos segundos y que, al mismo tiempo, les aporten información sobre tu marca y tus productos? Una vez más, la respuesta está en los elementos multimedia.
Crear una experiencia multimedia completa para el cliente puede ser costoso, por lo que tienes que considerar tanto los beneficios, como unas decisiones de compra más rápidas y seguras, como los costes de producción que implica una visita virtual o una presentación en 360º. Las soluciones fotográficas automatizadas pueden resultar claves a la hora de tomar esta decisión, ya que una inversión inicial te permite reducir sensiblemente el coste del proceso fotográfico al completo.
Más consejos: ¡haz que tus fotografías de ropa sean perfectas!
Si quieres que tu estudio fotográfico sea fiable y resulte productivo en lo que refiere a la fotografía de ropa, aquí tienes unos cuantos consejos generales sobre los ajustes de cámara, la iluminación y la organización de la sesión. Encontrarás aún más en nuestra guía completa para la fotografía de productos, así como en otros artículos dedicados a cómo fotografiar diversos tipos de productos.
Mantén la distancia focal en torno a los 50 mm
Lo más recomendable es trabajar principalmente con un objetivo de distancia focal fija de 50 mm. Debido a las características ópticas de los objetivos, a medida que aumenta su distancia focal es más probable que distorsionen la imagen, haciendo que los productos pierdan su forma y parezcan doblados en las fotos.
Mantén la apertura del diafragma en f/8 – f/16
Los valores de apertura de diafragma inferiores a f/8 y superiores a f/18 no garantizan que los artículos se capten con la nitidez necesaria. Por norma general, los objetivos tienen un rango de valores de apertura en el que pueden obtener una imagen óptima; puedes consultarlo en las especificaciones del equipo.
Mantén el ISO lo más bajo posible
Un ISO más bajo significa menos ruido en la fotografía. El valor recomendado si queremos evitar la aparición de grano en la imagen es ISO 100, ideal para fotografiar productos. Si es necesario aumentarlo en pos de lograr un efecto determinado mediante la iluminación, procura no superar el ISO 800.
Utiliza un trípode si vas a trabajar con velocidades de obturación bajas
Dentro del triángulo de ajustes de cámara (sobre el cual hablamos extensamente en nuestro artículo sobre los ajustes de cámara), lo más probable es que prefieras mantener la velocidad de obturación baja (por debajo de 1/60 s), sobre todo si fotografías cámara en mano. Si las condiciones de iluminación requieren el uso de velocidades de obturación más largas, lo más útil es solucionar el problema con un trípode. Estabilizará la imagen y garantizará la repetibilidad de los ángulos.
Consigue la textura correcta manipulando la iluminación
Si iluminas un artículo desde un ángulo ligeramente agudo resultará más sencillo exponer su textura. Una iluminación frontal, en la que la luz incide sobre el producto en un ángulo de 90º, reduce las micro sombras y hace que la prenda parezca plana y lisa, lo que no siempre será el objetivo de la fotografía.
Una iluminación con difusores blancos además suavizará la luz y añadirá un carácter personal a tu foto. Nuestro consejo es que te fijes en la temperatura de color de la luz y en el ajuste del balance de blancos de la cámara: deben estar en consonancia.
Reduce la sombra al mínimo
A la hora de fotografiar usando fondos de colores, te conviene manipular la luz de manera que los productos no arrojen sombras sobre ellos. Ser cuidadoso te hará las cosas más fáciles durante la posproducción si pretendes recortar el producto del fondo, o si simplemente quieres dar un acabado más limpio al resultado. Una fotografía sin sombras también te resultará muy útil si quieres sacar primeros planos a partir de una toma principal.
El dilema del postprocesado: ¿dónde está el límite?
La fotografía digital ofrece una variedad de opciones para corregir las imperfecciones de las fotografías de productos. Puedes ajustar la paleta de colores o el contraste, o eliminar las manchas de las superficies brillantes.
Como editor, es posible que sientas la tentación de llevar la foto más allá del realismo, en un intento por mostrar la mejor versión del producto mediante las potentes herramientas de Photoshop.
En nuestro artículo sobre la fotografía de joyas analizamos cuánto postprocesado es suficiente, lo que te ayudará a conocer tus propios límites. Este breve conjunto de reglas puede servirte de referencia básica cuando tengas que decidir si vas a utilizar mejoras de posproducción y, de hacerlo, en qué medida:
- ¿El artículo sigue luciendo natural? Compara el producto real con su representación fotográfica. Si la foto se ve visiblemente mejor que la realidad tendrás que volver a empezar el proceso de postproducción, esta vez respetando más la luz natural.
- ¿Está la imagen lo suficientemente nítida? Fíjate bien en los bordes del artículo y decide si se ven con la nitidez suficiente o si es necesario realzarla mediante filtros. Este proceso funciona mejor con elementos metálicos y con tejidos de hilo fino.
- ¿El contraste es el adecuado? A veces el nivel de contraste de la ropa de color no es satisfactorio y hace falta aumentarlo usando filtros. También puede ser que busques reducir el halo difuminado que se forma en los bordes de los objetos brillantes, especialmente cuando se fotografían sobre un fondo, sin recortarlo. Lleva siempre cuidado de no pasarte con el efecto.
- ¿Es correcto el nivel de saturación del color? Respecto a la saturación, la clave está en el equilibrio entre el atractivo y la información. Usuarios de la tienda y artistas gráficos pueden discrepar respecto a sus ideas sobre el nivel de corrección de color aplicado, pero por norma general prima la veracidad de la fotografía (una rápida comparación visual en un buen monitor debería bastar).
Reflexiones finales
Seguro que ahora tienes claro que la fotografía de producto es indispensable para una tienda de ropa virtual. Es probable que también te hayas decantado por uno de los dos caminos, montar un estudio propio o recurrir a la subcontratación.
Al saber si vas a fotografiar principalmente packshots, o si más bien estilo lookbook, podrás elegir qué enfoque perfeccionar, el de la precisión o el de la creatividad.
En cualquier caso, tendrás que considerar introducir elementos multimedia: si haces que tus prendas se puedan rotar y ampliar mientras se ven, las ventas aumentarán.
Con nuestra guía también habrás aprendido dónde están los límites de la posproducción si hablamos de imágenes de ropa, así como algunos trucos útiles a la hora de configurar el estudio.
¿Será suficiente para que comiences tu viaje por la fotografía de ropa con buen pie? Armado con paciencia y tecnología moderna, y siempre dispuesto a aprender mientras andas el camino, estamos seguro que lo lograrás.